Cada vez que te veo
el suelo que piso se vuelve
mar
Tu mirada me transforma
me vuelve como esos pétalos
de rosa
que solo
de tocarlos
se hacen cristal
Y si me besas
aunque tus labios solo
insinúen
que me besan
un dulce golpe de amor
me deja sin respirar
Alguna vez pensé
que era otra
cuan equivocado
estaba
No hay otra que pueda
lo que tú
puedes lograr
y eso
bien que lo sabes
Y quién
soy
para negarle a mi ojos
la melodía
de tu nombre
las mieles de tus labios
la danza de tus pechos mágicos
Quién
soy
amor
sino un hombre
perdidamente enamorado
que a veces vuelves
cristal
con las mieles de tus
labios
y otras veces
roble
para de ti
cuidar.